Consejo del mes
Crónica de una muerte anunciada
Agustina nos preguntó:
"Hace un mes que no veo lombrices en mi compostera, ¿Qué pasó? ¿A dónde se fueron? ¿Puedo seguir compostando sin lombrices?"
Hay varios factores que pueden influenciar en la desaparición de las lombrices pero por lo general el veredicto suele ser el mismo: si no ves lombrices en tu compostera es porque probablemente se hayan compostado y pasado a una mejor vida.
El calor excesivo, la humedad fuera de control, la emanación de gases a raiz de la acumulación de materia con nitrógeno (los residuos orgánicos húmedos), algún deprador o un cambio en el ph del compost; todas son razones posibles para comprender la muerte de las lombrices. Es por eso que para que ésta experiencia traumática no se repita (pensarán que exageramos pero el sentimiento de culpa es tremendo cuando descubrimos que liquidamos a las lombrices!!!) es clave saber la causa estimada del fallecimiento, hacer un chequeo exhaustivo para ver que no haya quedado al menos una en el embudo o en la base de la compas, y luego tomar la decisión de: si volver a traer las lombrices al mismo compost, seguir el compost sin lombrices o empezar desde cero. Según el grado de maduración, un compost ya maduro puede seguir su proceso en una bolsa aparte por unos meses. Si encontramos lombrices, por poca cantidad que sea, podemos darles algunas semanas para que se reproduzcan y aumenten la población (eso si cuidemos de no sobre-alimentarlas y de no repetir errores). Si queremos intentar compostar sin lombrices lo podemos hacer (si quedaron otros bichitos vivos), sabiendo que los tiempos son bastante más lentos que con las lombrices californianas, incluso si tenemos otras especies de lombrices.
Por último, la población de lombrices se puede reponer, si asumimos el compromiso de aprender de nuestros errores y estamos listos para darle una nueva oportunidad al compostaje!